El mapa de la implantación de Tesla en Europa es muy indicativo de la trayectoria del fabricante de coches eléctricos. La densidad de concesionarios y puntos de carga existentes en el centro y el norte de Europa va reduciéndose de forma drástica hacia el sur, hasta el punto de que España forma parte de un desierto. La apuesta del innovador fabricante de turismos eléctricos premium ha ido dirigida hasta ahora a Holanda, Alemania, Reino Unido y los países nórdicos, mercados en los que Tesla ha crecido mucho más que en España. Esa apuesta se puede ver en la calles de las ciudades de esos países, en las que es mucho más fácil ver un Model S de Tesla de particulares o taxistas.
Veinte valientes han comprado un Tesla este año
En cambio, en España sólo 20 valientes se han atrevido a comprar un coche de Tesla entre enero y septiembre y desafiar las trabas para importar el vehículo. Pero Tesla empieza a ponerse las pilas para buscar "oportunidades" también en España, donde no será extraño ver dentro de pocos meses una tienda de la marca en algún centro comercial en Barcelona y Madrid. El fundador de Tesla, Elon Musk, podrá comprobar el tirón de sus modelos en un país en el que las marcas de gama alta tienen una cuota de mercado por encima del nivel de renta correspondiente.
