Pocos cincuentones pueden presumir de llegar a esa barrera psicológica de la vida con la buena salud del deportivo Ford Mustang. El modelo cumplirá en abril los 50 años desde que apareció en el mercado de Estados Unidos en un momento en el que el coche ha resurgido con una mejora en la demanda y con la expectativa por el lanzamiento de una nueva generación en el 2014.
Hasta que llegue ese momento tan esperado por la legión de fanáticos que acumula, damos fe de rugido del cincuentón en una prueba en la que alcanza los los 260 kilómetros por hora de velocidad punta. De vértigo. Evidentemente, nosotros íbamos de paquete en manos de un piloto profesional en el circuito de pruebas de Ford en Lommel (Bélgica). Una cámara interior grabó mis reacciones durante unos intensos minutos. Tengo que decir que fue mejor hacer caso a las recomendaciones de los expertos de hacer la prueba "antes de comer" para evitar riesgos.
Si hiciéramos una encuesta de respuesta libre y espontánea con la pregunta de qué coches se han convertido en iconos de los deportivos de Estados Unidos, el Mustang ocuparía con toda probabilidad un puesto relevante junto con los Chevrolet Corvette y Camaro, las apuestas exitosas también del grupo rival General Motors.
El deportivo que tiene como emblema un caballo salvaje de las llanuras centrales de Estados Unidos de la raza Mustang -muy utilizado por tribus indias- ha sido conducido por actores y especialistas en múltiples películas y series de televisión y en videojuegos como el popular Need for Speed.
Entre los actores que han conducido un Mustang se encuentra Nicholas Cage en Gone in 60 seconds, en el que el coche sufre todo tipo de persecuciones y pruebas.
Desde que Ford creó el modelo, ya se han producido 8,5 millones de unidades, primero en la histórica planta de Rouge y, desde 2004, en la de Flat Rock, ambas en Michigan.
